Dentro de los actos conmemorativos del 2º Centenario de la Batalla de Vitoria, donde Napoleón fue derrotado y comenzó un cambio radical tanto en Europa como en la fortuna de más de un Vitoriano/Alavés, Slow Food Convivium Araba-Álava fue invitado a participar oficiando un plato de la época.
En las casas rurales, no solía faltar la harina, tocino, jamón, chorizo, carne seca, leche etc. y para la confección de unas gachas no hace falta más que un caldero, por lo tanto se decidió por Slow Food el hacer unas gachas a las que se le ha dado el nombre de Delicias del General Álava, además con un plato de gachas se puede aguantar bien toda una jornada.
Hoy a las 11 de la mañana, ya estábamos todo el equipo de cocina de Slow Food en la Plaza de los Celedones de Oro, antigua y mal llamada Plaza de Correos, ya que nunca oficialmente ha tenido este nombre.
Nuestra primera labor fue montar el tenderete de campaña con nuestras cocinas portátiles, ¡Bien hubiese estado haber tenido unos fuegos de leña y sobre el fuego colgando sobre trípodes los calderos¡, pero no seamos exigentes y con unos quemadores de butano nos arreglamos.
Otro asunto a resolver fue la cantidad a oficiar, ya que el día estaba nublado, hacia frío y lloviznaba a ratos y con estos factores se decidió oficiar dos cazuelas, en vez de las tres que teníamos previstas.
Las Gachas, delicias del General Álava se comenzaron a oficiar, sofriendo panceta en un buen aceite de oliva virgen extra, una vez la Chef de Slow Food Maite Gonzalez, consideró que estaban en el grado optimo de cocción,añadimos chorizo,
jamón y carne seca (Cecina). Una vez todo sofrito, se inclinó la cazuela para extraer la grasa y con ella
una vez caliente,añadir harina, que fue de trigo, de almortas hubiese estado tal vez mejor, pero ya se sabe que esta harina es ligeramente toxica, produciendo una intoxicación denomina latirismo y aunque hay que acumular en el cuerpo mucho de esta neurotoxina, no había que correr riesgos con los degustadores de esta preparación.
Una vez la harina añadida se comienza a ligarla con el aceite, formando un roux, al que
se le añade agua y leche,
ahora tocaba ir dando vueltas y más vueltas para que la masa perdiese el sabor a harina y desaparecieran todos los grumos.
Una vez conformes con la textura y sabor de la salsa se añadió el sofrito de los productos del cherry,
se dieron los últimos toques de sal,
y se remataron estas espectaculares gachas delicias del General Álava.
A la hora en que estaba anunciada la distribución se habia formado la cola y se comenzó a distribuir estas gachas populares.
El servicio fue rápido y ordenado.
Se terminaron las dos cazuelas y se dieron unas 800 raciones.
Durante la confección de las gachas nos pasaron por un costado las tropas Napoleonicas, las del General Álava y las de Wellington.
Aquí tienen unas instantáneas.
Las "Tropas" iban muy bien vestidas, desfilaron con seriedad y gusto mucho a la ciudadanía.
2 comentarios:
Llevo con ganas de probar unas buenas gachas ni te cuento. Hace unos meses conseguí harina de almortas, asi que con esta receta las preparo seguro. Se me han puesto los dientes tan largos.....
Virginia "sweet and sour"
Buenos días Virginia:
Creo que le gustarán.
Gracias por la visita y comentario.
Que pase buen día a pesar del gobierno.
Saludos
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